Sergio Uñac viajó a Buenos Aires la semana pasada para reunirse con Alberto Fernández, precandidato presidencial de Unidad Ciudadana. Tras el encuentro, el Gobernador sanjuanino aseguró que «hay coincidencias», pero reconoció que deben «seguir trabajando por el proyecto» en común.
La semana pasada estuvo marcada por nuevas señales políticas en el ámbito local y nacional.
Tras la contundente victoria de Sergio Uñac en las pasadas elecciones, quedaba ver cuál sería la posición nacional que tomaría el sanjuanino de cara a las elecciones nacionales que se vienen en agosto (PASO) y octubre (generales).
A nivel nacional sorprendió la internación de Alberto Fernández, quien se sometió a checkeos generales ante una descompensación. Y, tras recibir el alta médica, siguió con su agenda política en la que ya tenía previsto un encuentro con el Primer Mandatario local.
Tras esta primera reunión, Sergio Uñac habló de «coincidencias» con Alberto Fernández, precandidato a presidente en compañía de Cristina Fernández como vice, en la fórmula propuesta por Unidad Ciudadana, quienes buscan el apoyo del PJ nacional para sumar fuerzas y poder disputarle la presidencia a Cambiemos.
Al respecto, el sanjuanino aseguró que en su decisión de apoyos «voy a ser orgánico, siempre lo he sido», pero agregó que con este espacio aún necesitan seguir charlando y trabajando sobre «qué modelo de país» quieren en toda la región y cada provincia.
Tengamos en cuenta que el próximo miércoles vence el plazo para la presentación de alianzas partidarias para las elecciones de agosto, y Alternativa Federal, el espacio que arman Massa, Schiaretti y Urtubey, también pelea por el apoyo del PJ nacional.
En ese sentido, el Gobernador reelecto en San Juan aseguró que «es casi una realidad que Sergio Massa termine jugando una interna en este espacio, pero para eso hay que esperar más aún».
EL ENCUENTRO CON ALBERTO
Después del encuentro con el político nacional, el sanjuanino aseguró que «hubo buena onda» y que hablaron de la situación nacional en general, haciendo especial hincapié en la situación económica general, preocupados por los altos niveles de inflación que se mantienen y la pérdida del poder adquisitivo del salario de los trabajadores. También hubo tiempo para charlar sobre las economías regionales, cómo mejorar la competitividad y el transporte. Y ambos mandatarios coincidieron en mostrarse especialmente preocupados por los altos niveles de pobreza y desocupación.
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