La ofensiva del Reino Unido no tardó en llegar.
Tras la denuncia argentina contra la exploración ilegal de hidrocarburos en la plataforma continental argentina, el ministro de Relaciones Exteriores británico, Philip Hammond, advirtió que las acciones legales que pretende iniciar el Gobierno nacional son «un ejemplo escandaloso de la intimidación».
El secretario de Asuntos Relativos a las Islas Malvinas, Daniel Filmus, y la embajadora argentina ante el Reino Unido, Alicia Castro, brindaron detalles de la denuncia argentina en Londres, en una conferencia de prensa ante medios británicos. Esto motivó una respuesta el Reino Unido, que mostró su repudio a la decisión argentina de recurrir a la vía legal.
«Es un ejemplo escandaloso de la intimidación y amenazas contra el derecho de los habitantes de las Islas Falkland para desarrollar sus recursos económicos», aseguró Philip Hammond, ministro de Relaciones Exteriores del Reino Unido.
Horas antes, el gobierno de las Islas emitió un comunicado de prensa en el que afirmó que «no ve cómo la perforación es de ninguna manera una provocación», y reclamó «el derecho a desarrollar» su economía, «incluido el sector de hidrocarburos».
«Las perforaciones de exploración han estado ocurriendo en aguas de las Islas Malvinas durante muchos años. Vale la pena recordar que fue el gobierno de Argentina el que se alejó de trabajar con las Islas Malvinas en el desarrollo de una industria de hidrocarburos hace algunos años. El derecho interno argentino no se aplica a las Islas Malvinas y esta última acción es claramente otro intento por Argentina para tratar de bloquear el crecimiento económico en las Islas», destaca la presentación del gobierno isleño.
